ENTREVISTA / ÓSCAR GARCÍA

“La muerte no existe; en ese aparente fin, dejamos el traje de carne y pasamos a otro plano existencial”

ESTHER R. MEDINA

Óscar García, presidente del Grupo Espírita de La Palma.

Defiende la posibilidad de contacto entre el mundo espiritual y el mundo físico, entre los muertos y los vivos, la visión de la vida como un hecho de carácter universal y la reencarnación. Óscar García, investigador, escritor y experto en temas parapsicológicos, preside desde hace doce años el Grupo Espírita de La Palma.

El Espiritismo, explica Óscar García, autor de ‘Historia del Espiritismo en las Islas Canarias’, persigue, en resumen, que “el ser humano se conozca a sí mismo, descubra sus potencialidades y las desarrolle de manera integral y armónica”. El Grupo Espírita de La Palma ha organizado del 11 al 13 de julio, en el Museo Benahoarita de Los Llanos de Aridane, las XV Jornadas de Integración Humana centradas “en el mundo de los enigmas, la parapsicología, lo espiritual y lo alternativo”. Se trata de ofrecer “informaciones con trascendencia de la mano de investigadores serios, competentes y rigurosos, como forma de alentar una visión coherente de ideas que a veces son tratadas con banalidad por desinformados y por intereses constituidos”, señala.
-¿Qué es un espíritu en la filosofía Espiritista?
-Para la filosofía Espiritista el espíritu es la individualización del principio inteligente universal. Los seres humanos somos espíritus con cuerpo, y cuando se produce el fenómeno que llamamos muerte, el espíritu –aquello que somos cada uno en esencia, nuestra individualidad- lo único que hace es dejar su traje de carne para continuar viviendo, pensando, sintiendo, en una palabra, existiendo, en otro plano existencial que se denomina genéricamente como plano espiritual. Desde ahí venimos y ahí volvemos a través de una larga cadena de existencias para mejorar y evolucionar en múltiples experiencias corporales bajo diversas circunstancias y condiciones.
-¿Y qué se entiende por naturaleza espiritual trascendente?
-Con esta expresión se quiere aludir a ese principio inteligente inmaterial e inmortal que vive permanentemente y que constituye nuestra esencia, aquello que verdaderamente somos, por lo que no le afecta la muerte, sino que salta por encima de ese aparente fin, yendo más allá, es decir, trascendiendo el tan temido y creído limite final de la existencia, que no lo es, convirtiéndolo en un simple tránsito.
-¿Cómo definiría el Espiritismo y cuáles son sus objetivos?
-El Espiritismo es una filosofía vital que surgió de la mano del trabajo investigador y codificador del sabio francés Hipolyte León Denizard Rivail, más conocido con el seudónimo de Allan Kardec (1804-1869). Kardec fue discípulo del gran pedagogo suizo Pestalozzi y se dedicó en Francia a elaborar textos para las escuelas y universidades francesas alcanzando gran prestigio como pedagogo y educador. En cierto momento de su vida, un grupo de amigos le invitaron a que investigase un fenómeno que entonces estaba muy en boga en Europa, conocido como las ‘mesas parlantes’. De ese exhaustivo estudio experimental, partiendo desde una posición escéptica, finalmente concluyó que aquellos hechos evidenciaban una causa inteligente, la cual se identificaba a sí misma como los espíritus de seres humanos que habían vivido en la Tierra y que ahora moraban en una dimensión más sutil, pero no por ello menos real. Aquellos seres que decían eran como nosotros pero sin cuerpo físico, ofrecían informaciones rigurosas y coherentes sobre cuestiones que habían sido centro del interés de los seres humanos de todos los tiempos y lugares: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Por qué estamos aquí? ¿A dónde vamos? Todas aquellas informaciones, ordenadas y sometidas a una intensa reelaboración y muy sintetizadas, se publicaron en una obra que se tituló ‘El Libro de los Espíritus’, que vio la luz en 1857 en París y que tuvo un éxito inmediato, convirtiéndose en lo que hoy llamaríamos un best seller. Más tarde le seguirían otros títulos como ‘El Libro de los Médiums’, y varios otros hasta constituir la base filosófica, científica y ético-moral de lo que se conoce como Espiritismo, palabra que creó precisamente Kardec. Esta labor fue complementada posteriormente por otros autores. De una manera resumida, podemos decir que el Espiritismo persigue que el ser humano se conozca a sí mismo, descubra sus potencialidades y las desarrolle de manera integral y armónica para que cumpla a cabalidad el papel que le corresponde en el escenario de la creación, que es el de ser la conciencia de la naturaleza.
-¿Suele ser mal interpretado el término ‘espiritismo’?
-Como tantas otras cosas, sí. Y esto en razón del uso tergiversado que históricamente se hizo de esta palabra, relacionándolo con hechos, acontecimientos y circunstancias completamente ajenos a él, según conveniencia de los poderes y creencias establecidas, particularmente, y  hay que decirlo así porque es históricamente cierto, de la iglesia y sectores influidos por ella, que veían peligrar su papel de autoproclamados permanentes y únicos autorizados para actuar como interpretadores e intermediadores entre el nivel espiritual del ser, entre Dios, y el plano de la vida material. En este sentido, el Espiritismo proclama el libre ejercicio de las facultades humanas en aras del reconocimiento de su propio ser, de su naturaleza, de las layes de su desarrollo, por lo que diríamos que va en la línea de la autogestión espiritual, sin intermediarios, sin interpretadores, sin jerarquías, sin ritos, sin obediencias ciegas, con la razón por delante y dentro del más amplio ejercicio de la libertad de conciencia. El Grupo Espírita de La Palma dispone de un blog y en su encabezado vienen estas palabras: “Para opinar sobre una nueva idea, antes hay que estudiarla; estudiarla para comprenderla; comprenderla para juzgarla. Y esto únicamente puede hacerse si se acude a las fuentes originales". Ningún consejo mejor que este para ofrecer a quien se encuentre con informaciones contradictorias donde la palabra ‘espiritismo’ aparezca involucrada: que no se crea, que se compruebe, que se compare, que se evalúe, pero, ¡eso sí!, desde las fuentes originales, y si ahí alguien encuentra algo que no obedezca a la mayor lógica, al más exigente sentido filosófico y la más profunda ética, hágamelo notar que yo, como cualquier otra persona convencida de estos principios de vida, estaré y estará, encantada de dialogarlo en libertad.
-La doctrina Espiritista defiende que los muertos pueden entrar en contacto con los vivos ¿cómo se produce esa comunicación?
-Sin entrar en detalles, ya que no lo permite el espacio de esta entrevista, podemos decir que los seres humanos poseemos más sentidos que los cinco conocidos; o mejor, si se quiere decir así, que esos mismos sentidos se desarrollan hasta límites que permiten percibir frecuencias vibratorias de ordinario sustraídas a nuestras ventanas sensoriales. Estos son los denominados sentidos psíquicos, facultades paranormales o también facultades mediúmnicas. Cuando un ser humano manifiesta estas capacidades en un grado bastante mayor de lo ordinario, le llamamos médium, porque puede actuar como puente entre esos planos invisibles o intangibles, y nuestro mundo material, generando una enorme batería fenomenológica de cuyo estudio se ha derivado el abundantísimo conjunto de hechos experimentales que sostienen la interpretación filosófica y científica con consecuencias éticas que el Espiritismo proclama. Este extensísimo aparataje fenoménico y experimental se encuentra registrado en una amplísima bibliografía compuesta por decenas de miles de títulos escritos en todos los idiomas del mundo, la mayor parte de ellos accesibles a cualquier interesado.
-¿Y cuál es el objetivo de esa comunicación entre vivos y muertos?
-Para no ser yo con mis palabras quien lo exprese, me permito traer aquí lo que una entidad espiritual dijo al respecto en una comunicación espiritual obtenida por un famoso médium inglés: “¡Por favor, decid a todos que la vida continúa más allá de la muerte, si yo lo hubiera sabido en la tierra, mi vida hubiera sido muy diferente!”. Dicho en otros términos, llevar a la conciencia colectiva la convicción con pruebas de que la muerte no existe, que la muerte no es el fin de la vida y que somos los artífices de nuestra propia realidad, que somos los responsables de nuestros “infiernos” y los merecedores de nuestros “cielos”, por lo cual no da lo mismo lo que hagamos día a día con nuestra vida, sino que tenemos que saber lo que más nos conviene para crecer y evolucionar como seres humanos. Y otra cosa muy importante, que ninguna situación sufriente es definitiva, que no existen condenaciones eternas, ni destinos sufrientes permanentes, porque la causa suprema es amor -no tenemos mejor palabra para expresarlo-, y admitir destinos negativos sin fin es la mayor aberración que ha podido concebir una mente humana. Todo tiende al progreso indefinido.
-¿El Espiritismo contempla la existencia de vida en otros planetas?
-Sin duda, y entre sus principios básicos está el de pluralidad de mundos habitados.
-¿Qué implantación tiene el Espiritismo en La Palma?
-Si contestamos en función de la existencia de grupos o centros espíritas, tenemos que decir que escasa, ya que el Grupo Espírita de La Palma es el único en la Isla dentro de esta línea. Ahora bien, para nosotros más importante que el cartelismo es la extensión de las convicciones que constituyen la base filosófica espiritista, por su enorme potencial trasformador, se identifique o no con este rótulo. Visto así, la cosa cambia, pues cada día es mayor el número de personas en todo el mundo y también en la Isla, para quienes no va siendo ya extraño sino natural admitir ideas como la posibilidad del contacto entre el mundo espiritual y el mundo físico, la visión de la vida como un hecho de carácter universal, la autoresponsabilidad en la propia evolución, la pluralidad de existencias o reencarnación, la fraternidad como fundamento de una civilización más humana, justa, solidaria y espiritual, y eso a fin de cuentas es lo que verdaderamente importa.
-¿Cuándo se formó el Grupo Espírita en La Palma y qué labor desarrolla?
-El Grupo Espírita de La Palma se constituyó hace más de cuarenta años de la mano de algunos inmigrantes que conocieron estas ideas en tierras americanas, a donde fueron a parar buscando un mejor futuro para sus familias como emigrantes, y que una vez retornados desearon continuar profundizando en una filosofía que había abierto horizontes insospechados en sus mentes. A estos se unieron otros interesados de la Isla, dando lugar a la formación del grupo, que finalmente pudo verse plenamente legalizado tras el advenimiento de la democracia en España. En cuanto a la labor que el Grupo Espírita desarrolla, existen varias líneas. Por un lado, hacemos una labor permanente de estudio metódico de la ciencia, filosofía y moral espiritista a partir de la excelente literatura disponible, profundizando en la comprensión de sus fundamentos; de otro, tenemos reuniones donde se procura mediante métodos pedagógicos y técnicos precisos, la educación y eclosión natural de las facultades psíquicas y mediúmnicas presentes en los asistentes que se prestan a ello. En esta línea, y si las condiciones lo permiten, procuramos investigar aquellos hechos que se producen en nuestro entorno insular e incluso canario, ocasionados por causas espirituales –casas encantadas, personas que sufren fenómenos paranormales, apariciones y otros hechos psíquicos, etc-, intentando subsanar las consecuencias desasosegantes que llegan a generar en personas y familias. Y finalmente, una parte de nuestro trabajo se centra en la divulgación, para lo cual mantenemos un permanente programa de charlas, conferencias y a veces proyecciones y debates, siempre de acceso libre y gratuito, cada viernes a partir de las 19:30 horas en nuestro centro sito en el 1º D del Edificio Vizconde, en el número 69 de la Avenida Carlos Francisco Lorenzo Navarro, en Los Llanos de Aridane. Asimismo, hacemos intercambios con otras instituciones similares o afines de toda España y de numerosos países, realizamos viajes de investigación o asistimos a congresos y jornadas a los que somos invitados como ponentes.
-¿Cuál es el perfil de la persona que practica esta filosofía?
-No hay un perfil definido, sino que hay de todo, desde agricultores, pasando por profesionales, personas con estudios universitarios, técnicos  e incluso amas de casa. Pero es notoria, y sin que esto signifique otra cosa que dejar constancia de ello, pues desde el Espiritismo no se mira a las personas por sus títulos sino por lo que son en su interior, que han existido y existen destacadas figuras de la ciencia y la cultura que participaron de los principios espiritistas, y por citar solo algunos cabe mencionar a Sir Arthur Conan Doyle, William Crookes, Ernesto Bozzano, Thomas Mann, Camilo Flammarión...
-¿Qué requisitos hay que cumplir para poder formar parte del grupo?
-El único es el de ser mayor de edad y manifestar su deseo de integrarse en el mismo por su coincidencia con sus planteamientos y objetivos, y una cierta continuidad como participante en sus actividades; nada más.
-¿Vive el ser humano apegado a lo material y alejado de lo espiritual?
-El ser humano vive apegado a lo que conoce y como lo material es lo primero que identifica, a eso se apega porque tenemos tendencia a fijarnos a aquello que nos da seguridad. No obstante, el ser humano vive en permanente proceso de cambio, quiera o no, y llega un tiempo en que lo que una vez le dio satisfacción, ya es incapaz de responder a las nuevas necesidades y preguntas que surgen en el interior, lo que se transforma a la larga en una búsqueda que dará sus frutos en forma de descubrimientos y respuestas, pues ningún anhelo sentido quedará jamás sin ser llenado por la vida. El descubrimiento de la realidad espiritual de la vida es algo inevitable, tarde o pronto, porque eso somos.
-¿Desarrolla más su parte espiritual en época de crisis?
-El ser humano se desarrolla siempre, pero sí es verdad que de manera colectiva es en época de crisis donde a la par que se desmorona el sistema de referencias hasta entonces vigente, es decir, el viejo paradigma, surgen las preguntas interiores en mayor número. Por eso las crisis no son algo malo en sí mismas, sino la manifestación de un proceso de cambio, el síntoma de un mundo que deja de ser y la frontera hacia un mundo que asoma en el horizonte. Las crisis se dan en lo individual y también en los modelos sociales colectivos. Ahora mismo vivimos una crisis global, una crisis de fundamentos pero no solo económicos sino estructurales, estamos en un giro de la historia y a los que vivimos este tiempo se nos exige una elección consciente, que va a determinar la dirección de nuestro futuro inmediato. Y si el tránsito es inevitable, lo que puede variar es la forma. Cuantos más obstáculos se interpongan al fluir del río de la evolución, el agua que se acumula detrás sorteará con más dificultades dichos obstáculos, pudiendo ocasionar sufrimientos que podrían evitarse si nos alineásemos conscientemente con dicho fluir. Si una palabra pudiese definir esta época, esta sería ‘desorientación’. Pero aún así, en el seno de esta barahúnda que es nuestro tiempo, están naciendo las directrices del futuro, aún ahogadas por los estertores del viejo modelo que dará muchas batallas todavía. ¿Identificaremos estas directrices? Para esta identificación y para esta elección consciente se requiere desarrollo espiritual y este tiempo también lo favorece.
-¿Cuál es objetivo de las Jornadas de Integración Humana que organiza anualmente el Grupo Espírita de La Palma?
-Desde que en un ya lejano 1989 y con una denominación distinta –entonces Jornadas Paracientíficas- concibiésemos la idea de organizar unas jornadas dedicadas a la difusión de estudios e investigaciones centradas en el mundo de los enigmas, la parapsicología, lo espiritual y lo alternativo, los principales objetivos se mantienen, como son: ofrecer a la población de la Isla y a los visitantes que se sientan atraídos, un abanico de informaciones con trascendencia de la mano de investigadores serios, competentes y rigurosos, como forma de alentar una visión coherente de ideas que a veces son tratadas con banalidad por desinformados y por intereses constituidos. Si lo hemos logrado o no, es una respuesta que compete a los miles de asistentes que a lo largo de todos estos años han estado presentes en todos los actos que con cariño y dedicación hemos organizado los componentes del Grupo Espírita de La Palma y colaboradores, que también los hemos tenido. No podemos dejar de mencionar tampoco la ayuda continuada que hemos recibido de instituciones como el Cabildo Insular de La Palma y en ocasiones de ayuntamientos como el de Los Llanos de Aridane, El Paso o Santa Cruz de La Palma, localidades donde se han celebrado la jornadas en sus diferentes ediciones, así como también puntualmente de algunas empresas y firmas de la Isla.
TOMADO DE:  http://www.lapalmaahora.com/articulo/sociedad/-la-muerte-no-existe-en-ese-aparente-fin-dejamos-el-traje-de-carne-y-continuamos-viviendo-en-otro-plano-existencial/20130709223955007462.html